Después de la década de 1970 y hasta el año de 1995, los estudiantes de tercer grado de secundaria que aspiraban a continuar su preparación académica en el nivel medio superior tenían varias opciones educativas: UNAM, IPN, Colbach, Conalep, DGTA, DGTI, UAEM, preparatorias oficiales, entre otras. Sin embargo, para ingresar a cualquiera de estas ofertas educativas era necesario estar pendientes de sus convocatorias o de las fechas de preinscripciones e inscripciones.
Ante esta situación, en 1995 las instituciones públicas que ofrecen el mayor número de espacios educativos en el nivel medio superior de la zona metropolitana de la ciudad de México conformaron la Comisión Metropolitana de Instituciones Públicas de Educación Media Superior (Comipems).
Estas establecieron un acuerdo para ofrecer a los estudiantes de secundaria y a los egresados de este nivel un proceso equitativo y transparente que les permitiera elegir de entre sus opciones educativas ofertadas las que más se apegaran a sus aspiraciones, a través de un solo pago y procedimiento de registro.
Así fue como en 1996 Comipems realizó por primera vez el Concurso de Asignación a la Educación Media Superior de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México.
¿El objetivo de Comipems?
De acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP), desde el momento de su creación, Comipems ha orientado y apoyado a los estudiantes de secundaria y a quienes han terminado este nivel educativo para la continuación de sus estudios.
De esta manera, los estudiantes tienen a su disposición toda la información correspondiente a las opciones ofrecidas en el nivel medio superior.
“Una premisa esencial dentro de este objetivo es respetar totalmente las decisiones de cada uno de los aspirantes, permitiéndoles combinar en el orden de su preferencia desde una hasta 20 opciones, sin condicionamiento, inducción o limitante de ninguna índole”.
La SEP precisó que al realizar esta asignación en un solo proceso, se alienta el análisis y la reflexión de cara a las instituciones que conforman actualmente a Comipems y todas las opciones posibles, evitando la duplicidad de registros y el desgaste que representaba la presentación de varios exámenes de admisión.
“Desde su inicio, el concurso de asignación ha evitado tener una función de selección para enfocarse en la distribución de todos los demandantes entre todas las opciones disponibles, pero respetando siempre sus aspiraciones y decisiones, es decir, tener como único criterio de asignación el resultado obtenido en el examen y el orden de la elección de cada aspirante”.
¿El fin de Comipems? La razón de Sheinbaum para eliminarlo
El futuro de Comipems es incierto luego de que Claudia Sheinbaum Pardo, quien asumirá la presidencia de México para el sexenio 20224-2030, propuso la eliminación del concurso de asignación, para que los jóvenes que concluyan el nivel básico escolar se inscriban a los colegios más cercanos a su domicilio.
Fue el 08 de abril de 2024, cuando Claudia Sheinbaum se comprometió a “echar para atrás” el examen del Comipems, “porque todos los estudiantes deben entrar a la preparatoria que le quede más cerca de su casa. Porque queremos a los jóvenes en la escuela. No queremos a los jóvenes en la calle”.
En ese momento visitaba las instalaciones del IPN y comentó que al asumir la Presidencia de México trabajará con el Politécnico, la UNAM, la UAM, y las universidades de los estados para que haya más matrícula educativa.
De igual manera sugirió elevar a nivel nacional a la Universidad Rosario Castellanos y la de la Salud.
Días después, de gira por Chalco, Estado de México, la triunfadora de las elecciones presidenciales reiteró que el examen de la Comipems se instauró “con la idea de que los más aplicados fueran a las mejores escuelas y eso solo genera división (…) Vamos a hacer más preparatorias”.
Con la probable eliminación de Comipems, posiblemente cada institución regresará a su propio sistema de selección, con una convocatoria y fecha especial para la aplicación de su examen.
