Propietario de Patagonia Grafic, uno de los locales afectados, estimó las perdidas en unos $30 millones a causa del voraz siniestro.
“Entre todos rompimos el portón y ahí pudieron sacar a las señoras“, comenzó narrando uno de los 6 temerarios jóvenes que ayudó a que la tragedia no cobrara vidas humanas, tras el voraz incendio que en la madrugada de este lunes arrasó con una antigua propiedad de dos pisos en calle Fagnano signada con el número 545, frente al Liceo San José, que era parte de una casa habitación y dos locales comerciales.
Sergio Miranda (26) vive detrás de la propiedad siniestrada y relató que estaba durmiendo, cuando su polola al advertir olor a humo, le avisó del incendio. “Ahí miré por la ventana y estaban las llamas, salí (por calle Chiloé), di la vuelta y justo habían cinco chicos. Primero saltamos el portón de lata del estacionamiento y cuando supimos que había una señora postrada, lo rompimos nomás y ahí justo llegaron los carabineros y bomberos. Eso fue como a las 3,10 horas. Si no la hubiéramos escuchado gritar…”, complementó, junto con señalar que fueron los ladridos de un perro los que despertaron a una de las mujeres que salvaron providencialmente de ser atrapadas por las llamas.
En el intertanto que se producía el rescate de las mujeres, Sergio Miranda fue a su casa en busca de su pequeña de 4 años, para no exponerla a la toxicidad del humo. “Me dio pena lo que pasó. Yo conocía además a los propietarios de los locales, va a ser difícil empezar de cero justo en esta fecha. Con esto hay que ser cauteloso en cortar bien el gas y tratar de tramitar un seguro”, remarcó.
Al lugar llegaron unos 80 voluntarios de seis compañías de bomberos de Punta Arenas, luego que se diera la alarma a las 2,29 horas. Las llamas recién lograron ser extinguidas cerca de las 3,30 horas de este lunes. El foco de las llamas habría surgido desde el segundo piso de la casa habitación a causa de una falla eléctrica. Producto de lo anterior, sumado al humo y al agua que debió utilizar bomberos para aplacar el fuego, tanto el local de Miguel Montecinos (Fagnano 565-A), como el de Comercial Mega (Fagnano 565-B) -dedicado a la venta de productos industriales de gastronomía-, ambos en el primer nivel, resultaron totalmente anegados y por ende sus implementos totalmente dañados.
Comerciante afectado
“La embarré, tenía que haberlo asegurado”, exclamó aún choqueado, molesto con la situación y viendo a la vez cómo salir del paso, el diseñador gráfico Miguel Montecinos Sánchez (42), quien vio cómo en la madrugada de ayer su empresa familiar Patagonia Grafic -agencia de publicidad y diseño gráfico- quedaba destruida, tras el incendio.
El profesional estimó las pérdidas en al menos unos 30 millones de pesos, por cierto no existiendo seguros comprometidos. “Anteriormente se me rompieron las máquinas, falló todo, tuve que partir de cero. Ahora esto. Logré llevar la máquina a la casa (un plotter) y lo único que quiero saber es si está buena o no, porque cuesta $15 millones y no tengo más plata. Mira la fecha en que estamos, tenía un montón de trabajo para unas empresas, andaba súper bien. Un bombero se apiado y sacó los pocos cheques que tenía, una plata que tenía en una caja de cartón y unos regalos de Navidad que tenía ahí adentro”, relató consternado.
A pesar que no lo hizo, lo concreto es que Montecinos relevó la importancia de tomar un seguro, para resguardo ante situaciones como la que acaba de vivir. “Ya anteriormente hubo por acá un amago de incendio. Ibamos a colocar un seguro con mi compañero de negocio de acá al lado, pero no lo hicimos. Eso fue de quedados, uno dice por las fiestas ‘lo voy a hacer después. Imagínate que ahora me iba de vacaciones a Puerto Montt y que si esto hubiese ocurrido estando en el norte, hubiera sido peor aún”.
El diseñador precisó que previo a la llegada de bomberos, un grupo de jóvenes logró ingresar al recinto, rescatando a las dos mujeres que se encontraban en la zona posterior del inmueble que se estaba incendiando, entre ellas una mujer de 74 años. “Los bomberos demoraron varios minutos y un chico que vive a la vuelta, junto a otras personas salvaron a las señoras que estaban solas arriba y que no podían salir. Si no, se queman, una de ellas, la mayor, es postrada y la otra era la nana”, consignó el arrendatario del inmueble.
Fuente:laprensaaustral.cl
