Esta enfermedad no se puede transmitir de persona a persona y para evitarla es necesario mantener un entorno saludable.
La Rickettsia es una enfermedad causada por un microorganismo que comparte características tanto de las bacterias como de los virus. Normalmente viven en parásitos, como garrapatas, pulgas y piojos y se transmiten a los humanos a través de las picaduras de estos insectos, de ahí la importancia de mantener a las mascotas aseadas y con sus vacunas al corriente para evitar la transmisión.
Esta enfermedad no se puede transmitir de persona a persona y para evitarla es necesario mantener un entorno saludable.
Se recomienda:
– Revisar a las mascotas de forma periódica
– Evitar que duerman en la misma cama que los seres humanos, en especial de los niños, pues el sistema inmunológico de los menores aún no está preparado para defenderse de ciertas enfermedades
– Fumigar para evitar la propagación de fauna nociva
– Evitar tener sillones, colchones y otro tipo de muebles en el patio, porque de estar contaminados propician el contagio de la enfermedad.
Una persona con ricketssia puede presentar fiebre, dolor de cabeza, escalofríos, dolor muscular, sangrado leve en encías y erupción cutánea.
Para prevenirla, se recomienda lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, después de haber tocado a la mascota, bañarse y cambiar la ropa diario, no compartir objetos personales como gorras, peines, almohadas o adornos del cabello.
Fuente: La Silla Rota
