Días atrás, en la búsqueda de “falsedades periodísticas”, leía Noroeste, periódico prolífico en la divulgación de mentiras o en propaganda política afin a los propósitos de uno de sus copropietarios, Manuel Clouthier Carrillo.
Leía Noroeste y me encontré con la “corona de las calumnias” lanzada contra la Universidad Autónoma de Sinaloa, adjudicándole a sus autoridades un “presunto” daño a la UAS por mil 529 millones de pesos en el 2015, cantidad equivale al 36.5 por ciento de los 4 mil 84 millones 69 mil 400 pesos ejercidos ese año.
Según Noroeste, la Auditoría Superior de la Federación evidenció que la Universidad Autónoma de Sinaloa ocasionó presunto daño a la Hacienda pública federal al aplicar irregularmente los subsidios recibidos en 2015.
A los dos días, como es costumbre el caricaturista estrella de Noroeste, Gilberto Ceceña Nuño, dibujó unos monos ofreciendo la retorcida lectura de que esos dineros habían sido destinados al ejercicio de un partido político. Ya se imagina usted la malévola intención de Manuel Clouthier.
El 12 de febrero de este año, el director de Noroeste,Adrián López Ortiz, llamó a la planta laboral del periódico a la reinvención sin perder el modelo fundacional de independencia, ética y valores -¿Cuáles, pues?-.
En lo que llamó la Convención Noroeste, con la participación del equipo de la empresa, Adrián López Ortiz les aclaró a sus empleados que “son tiempos de adaptar el modelo de negocio y de cercanía con los lectores, readaptarse, aprender nuevas habilidades, romper paradigmas y entrar de lleno a la reconversión (….)».
Frente a la incertidumbre del escenario actual de los medios – agregó- “pocas premisas están tan claras como la siguiente: la reinvención sucede desde adentro”.
Cuando leí esa “noticia” pensé: solo se reivindican los bellacos, quienes le han fallado a la sociedad. Solo se reinventan quienes pretenden ofrecer un rostro falso de cara a su comunidad o entorno.
Noroeste le ha fallado a la sociedad por eso busca reivindicarse, readaptarse y reiventarse ¿Cómo lo va a lograr? ¿Siguiendo la línea editorial de Manuel Clouthier? ¿Buscando la destrucción de la Universidad Autónoma de Sinaloa?
La “corona de las calumnias” del Noroeste de Clouthier, del periódico que busca su reivindicación ante la sociedad, es inventar un “presunto” daño a la UAS por mil 529 millones de pesos en el 2015.
Al leer la infamia, de inmediato pensé: no faltaran quienes, tontos útiles o enemigos tradicionales de la UAS o de la Educación Pública hagan eco a la difamación con caricaturas, “análisis”, comentarios o artículos, como ha sucedido en otras ocasiones, en que se ha difamado a la UAS y sus autoridades.
No me equivoque. Los corifeos de la mentira han salido de nuevo de sus guaridas escribiendo o hablando pestes de la Universidad y sus autoridades. Afortunadamente ya todos los conocen. Saben de qué patas cojean.
No hay tal daño ni tal desfalco. Si es cierto que la Auditoría Superior de la Federación hizo algunas observaciones sobre el uso de recursos a la UAS, pero los avisos obedecen a que la SEP y la SHyCP no reconocen los recursos que se destinan al sostenimiento de las preparatorias y el pago de la “jubilación dinámica”.
La “jubilación dinámica” es una prestación contemplada en el Contrato Colectivo de Trabajo, firmado décadas atrás entre el SUNTUAS y la UAS. Es una doble pensión que se paga con recursos de la UAS y se empalma a la que los jubilados reciben del IMSS.
La ASF hizo otra observación sobre el pago del ISR. Pero los trabajadores administrativos no pagan este impuesto y con base en el Contrato Colectivo de Trabajo la UAS absorbe o cubre ese gravamen en apoyo a su planta laboral.
Ya se le aclaró a la ASF, la SHyCP y la SEP que los recursos a que se refiere la Auditoría son aplicados puntualmente en el sostenimiento de las preparatorias y de la jubilación dinámica y que existe convenio de por medio para cubrir el ISR.
La acusación perversa contra la UAS y sus autoridades es delicada. Representan una clara amenaza contra el alma mater porque vienen de Manuel Clouthier, quien le apuesta a la educación privada y porque se ha distinguido por dar cabida entre sus páginas a personajes que se dedican a difamar a la universidad, faltando a la ética y al rigor periodístico.
Porque Clouthier cobija a personajes que apoyaron la desaparición del Fideicomiso de la Jubilación Dinámica, que le daba vialidad al pago de la doble pensión a los trabajadores jubilados de la Universidad.
No cabe la menor duda de que la información distorsionada, las falsedades difundidas por Manuel Clouthier en Noroeste, tienen como propósito intentar “crear conciencia” para obligar al gobierno federal a que desaparezca las preparatorias de la UAS.
Es claro que Manuel Clouthier al permitir en su periódico los ataques contra el Fideicomiso para la Jubilación Dinámica, tenía el propósito que desapareciera y lo logró, para ahora irse con todo contra la “jubilación dinámica”, y exigir a la SEP y a la SHyCP, que cancele esta prestación.
Seguiré hojeando día tras días el periódico Noroeste para ver si encuentro alguna pista, huella o lectura de que en verdad busca su reivindicación ante la sociedad.
