Victoria Plá
Tanto el balayage como las babylights son las dos técnicas de coloración más adoradas en todo el mundo. El motivo es que son capaces de iluminar, rejuvenecer y aportar volumen y movimiento a cualquier melena, independientemente del color natural que sea. Su éxito es tal, que las tendencias de pelo (cortes aparte) ya no solo hablan de los tonos de tinte de pelo que se llevarán cada temporada, sino que también hacen referencia a las últimas versiones de estas técnicas de color, como estos 5 tonos de balayage que se llevarán en 2021.
Shatush
A pesar de que a priori puedan pueden confundirse con las californianas, estas proporcionan un efecto mucho más natural, a pesar de en el degradado las raíces se mantienen más oscuras y las puntas más claras. “Esta opción es perfecta para las mujeres que buscan un efecto más suave y actual. No necesita retoque hasta transcurridas 16 semanas, es un trabajo muy artesanal”, comenta. Georgiana Todose, colorista del centro SAHB.
La clave es “dotar de una apariencia natural al cabello, con reflejos y un brillo propio, donde no se aprecia ningún corte cromático a lo largo de la melena”, asegura Paul Tudor, director del salón David Künzle Fuencarral. Están hechas para ti si te has hartado del efecto raíz que provoca el tinte.
Chunky
Son dos mechones frontales, más gruesos, que enmarcan el rostro gracias al efecto claroscuro que se produce con el resto de la melena. Son muy versátiles, ya que se pueden lucir en todos los tonos de pelo, y aportando mucha luminosidad. Inmaculada García, directora de formación de Menta Beauty Place, propone una opción ideal para las más atrevidas: “Una vez decolorado el cabello, también se puede matizar con el color fantasía semipermanente que más guste”.
Melting Blonde
Estas mechas se pueden traducir como rubio derretido, por el efecto que produce el color sobre la melena. “Son una transición de un tono oscuro a otro más claro y a lo largo de todo el cabello, difuminándose de manera sutil para lograr un degradado que nadie note”, aclara Todose. A lo que Tudor añade: “Es muy apropiado para todo tipo de bases naturales y para mujeres que no quieren un cambio muy radical. Además, se suele hacer con pincel porque no se buscan tonos muy potentes, pero sí un aclarado más global”.
Publicado en Mujerhoy
