Zamora en las faldas de la mujer

María Margarita Free del Castillo

Que me disculpe Mario, pero anda mal; por ahí no es, por ahí no: a la mujer se le protege no se le usa…. 

La campaña de Mario Zamora Gastélum además de estar montada en la estructura del gobierno del Estado mantiene como su principal sostén o eje varias farsas políticas. Van casi tres semanas de la jornada y los escenarios falsos y show mediáticos del candidato del PRI-PAN-PRD son una burla para la sociedad sinaloense.  

A Mario se le pasó la mano. Si es censurable, criticable y constituye en delito difamar y calumniar, pero también es una falta a la ley usar a las instituciones de procuración de justicia e investigación de ilícitos como instrumentos electorales o de ataque político, y es además perverso, ruin, usar a una mujer, a la esposa, para armar shows mediáticos para difamar y calumniar.  

Mario Zamora Gastélum denunció penalmente a cuatro portales digitales que, según dijo, han difamado o difaman a su esposa y su familia. Hasta ahí iba bien. Le aplaudimos que haya acudido a la instancia correspondiente. Pero “tiró pa’l monte”. El mismo se encargó de “contaminar” la querella.  

Armó un circo afuera de la Vice-Fiscalía Regional Zona Norte para culpar de los ataques digitales a Rubén Rocha Moya y a Héctor Melesio Cuén Ojeda, aunque aclaró que será la autoridad quien determine quienes son los responsables. “Yo no soy el investigador, yo creo en las instituciones, por eso vengo aquí ante la Fiscalía”, dijo.    

“Hay unas páginas de Facebook donde puras mentiras, puro denostar, puro tirar lodo. No habría problema si sólo se metieran conmigo, pero se están metiendo con mi mujer. Y deben saber que los sinaloenses somos de los que defendemos a nuestras mujeres”, dijo el candidato en un video. 

De acuerdo. Estamos de acuerdo. En Sinaloa los hombres defienden a las mujeres, pero no las usan. Los sinaloenses bien nacidos, no nos usan para atacar a otros sin fundamento. Sin tener, como dicen en el rancho, los pelos de la burra en la mano. 

1.- Mario Zamora dijo que él no es investigador y que será la autoridad la que determine quienes son los responsables de los ataques, pero desata una “guerra sucia”, cargada de perversidad, contra Rocha y Cuén, usando cobardemente como ariete de sus ataques las difamaciones, que dice se le hacen a su esposa Wendy. Mal se ve Mario. 

2.- Al culpar a Rocha y Cuén, Mario Zamora viola el debido proceso y manda el mensaje de que no le interesa transitar por la legalidad ni que se ubique a los responsables de las supuestas difamaciones contra su esposa sino hacer daño político al candidato de Morena-PAS, Rubén Rocha Moya y a su principal aliado Héctor Melesio Cuén Ojeda. Es lamentable y vergonzoso que Mario que se dice un político honorable, transparente, incurra en estas prácticas fuera de la ley.    

3.- Rubén Rocha y Cuén Ojeda no ganan nada y perderían tiempo en una campaña estéril de este tipo (como la denunciada) porque la señora Wendy Ibarra no es la candidata ni la que aparecerá en las boletas electorales, aunque Mario Zamora la use como “operadora” de campaña.  Nada ganan perdiendo el tiempo con los de atrás. Rocha Moya va 20 o 25 puntos adelante de Mario Zamora. Con el debido respeto, pero no es la señora Wendy Ibarra la pieza importante del engranaje que da impulso a la campaña de Zamora; sí lo es el gobernador Quirino Ordaz Coppel y los grupos de multimillonarios que lo respaldan.  

4.- La candidatura de Mario Zamora desarticuló y derrumbó proyectos políticos de priistas y panistas; “tumbó” candidaturas de priistas importantes que conocen el oficio político. La imposición del mochitense daño intereses políticos en los 18 municipios de Sinaloa. Solo en el municipio de Ahome, acabó con las aspiraciones de convertirse en candidatos a alcaldes de Bernardino Antelo y de Álvaro Ruelas Echave y de otros políticos priistas. En los 18 municipios “movió” a su antojo las piezas generando inconformidades con la designación de sus candidatos. 

5.- La imposición de Mario Zamora sepultó el proyecto del priista Jesús Valdez Palazuelos y de otros políticos de colmillo largo y retorcido que buscaban ser tomados en cuenta como aspirantes, de primera línea, al gobierno de Sinaloa, presidencias municipales o a las diputaciones federales y locales consideradas seguras, es decir, las plurinominales. Uno de los más dañados fue Juan Alfonso Mejía, titular de la SEPyC. La llegada de Mario Zamora provocó la salida del PRI de personajes de la talla de Rosa Elena Millán Bueno y Juan Ernesto Millán Piestch y de otros que aún no han dicho que ya se fueron del PRI, pero que trabajan para el proyecto de la Cuarta Transformación, o para el PAS, Movimiento Ciudadano, Fuerza por México, PVEM u otros partidos. 

6.- Los juegos perversos del poder que llevaron a Mario Zamora a ocupar la candidatura del PRI-PAN-PRD provocó la salida del PRI de Sergio Torres Félix, que se fue como candidato del Movimiento Ciudadano al gobierno de Sinaloa. 

7.- En Ahome, los rivales de cuidado de Mario Zamora son Mario López Valdez y Gerardo Vargas Landeros.    

8.- En Ahome a los Zamora no los quieren. Es en esa tierra o municipio donde él y su padre, Mario Zamora Malcampo, han sido rechazados por el electorado. A los dos los ha derrotado el PAN cuando compitieron por la alcaldía con las siglas del PRI. 

9.- La alianza PRI-PAN-PRD motivó la deserción de connotados panistas y de cientos de militantes del blanquiazul, que ven en Zamora la representación encarnada de la corrupción de los gobiernos del PRI.  

10.- Mario Zamora aparece en segundo lugar en las preferencias electorales, y hay 6 candidatos que aspiran desbancarlo y a ocupar el segundo lugar, para competir tú a tú con Rubén Rocha Moya. La estrategia sería “sonarle” a Mario para cegarlo y desgastarlo y que se enfrente en una guerra verbal contra Rocha, sin ubicar el origen de los ataques. 

Que me disculpe entonces Mario, pero anda mal; por ahí no es, por ahí no. No es de hombres usar a la mujer, a la esposa, para descargar frustraciones ni desarrollar campañas sucias. No pega eso de andar gritando como loco porque le difamaron a la mujer, dice él. Se ve ridículo usando a la señora Wendy Ibarra como escudo y lanza de sus ataques a tontas y locas.  

Meterse o esconderse en las faldas de una mujer para blandir acusaciones difamatorias no habla muy bien del abanderado del PRI-PAN-PRD… 

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