Los moños, bollos, rodetes o como quieras llamarles, son peinados que ya no están reservados para bailarinas, sino que todas aprendimos a usarlos y a enamorarnos de ellos.
Lo cierto es que son tan versátiles que puedes hacerlos de varias maneras, para no tener siempre el mismo look, y poder seguir luciendo tu cabello de una forma tan práctica como femenina.
Un moño bajo como este, con algunos mechones enrollados a los lados queda formal y te deja el pelo bien sujeto para moverte todo el día.
Ideal para el trabajo, reuniones y, por qué no, un peinado de novia si le añades accesorios.
¡Ay, me encanta! Sujetar el moño con palillos es una gran opción, y es una forma de añadir un accesorio simple y delicado que queda fantástico.
¡Ah, bueno! Es un look ideal para manifestar tu creatividad y destacar en las multitudes.
Enrollado y por debajo, es un peinado que da un aspecto de gran pulcritud y que queda espectacular si estás maquillada y lookeada. ¿Te gusta?
Y no siempre estamos tan arregladas ni peinadas. ¡Esta es la verdad del moño! Así lo hacemos en casa, cómodo, informal, ¡hermoso!
¿Qué tal si llevas un poco de movimiento a tu peinado? Esta alternativa torneada te vendrá de mil maravillas y, como puedes ver, ¡es muy sencilla de realizar!
Es hora de reinventar tus moños y seguro que todas estas ideas te van a servir para no hacerlos todos los días de la misma manera. ¿Cuál prefieres?
Publicado en imujer.com