Ahora pon en orden tu dinero, te decimos cómo ahorrar

Sonia Soto/ Pixabay

Pagar y comprar en nuestros días es tan sencillo como dar un clic o pasar una tarjeta de débito y crédito.

Esta facilidad nos hace víctimas de hábitos de consumo nada sanos, se asegura en el e-book ¿cómo hacer un presupuesto? de la plataforma de ahorro e inversión Piggo.

Por ello, la forma más sencilla de empezar a desarrollar conductas saludables hacia nuestro dinero es realizando un presupuesto.

PASO A PASO
¿Qué necesitas?

De acuerdo con el libro de la plataforma de inversión y ahorro, esto es lo que requieres:

Una hoja de papel de preferencia cuadriculada o un cuaderno, por escrito siempre es mejor, nada de que yo lo traigo en la cabeza, sé serio.
Un lápiz n Una calculadora
Tus recibos de nómina
Los estados de cuenta de tu tarjeta de crédito
Estados de cuenta de otros créditos como auto, vivienda, etc.
Los recibos de tus servicios, es decir, luz, agua, teléfono
Y cualquier otra información sobre tus gastos
Y AQUÍ VAMOS…
1. La primera parte son los ingresos

Comienza a hacer una lista de todas tus fuentes de ingreso o actividades que te generen dinero, las cuales tengas de manera periódica.
A lado de cada fuente de ingresos escribe cuánto recibes.
Agrega tantos como necesites o fuentes de ingreso tengas.
Al final suma todo y escríbelo inmediatamente abajo.
2. La segunda parte, y tal vez más laboriosa, son los gastos porque casi siempre tenemos más que fuentes de ingresos.

Primero divide tus gastos en fijos y variables, coloca los montos que destinas a cada uno.
Si en el tema de la despensa se te dificulta poner totales, pon un aproximado de ello.
Si todos los días compras un café es un gasto fijo, no un antojo, así que considéralo como tal
Sé muy honesto, de lo contrario este ejercicio no servirá.
3. Ahora vamos con las deudas y los créditos.

Registra todos los préstamos que tienes: auto, compras, a meses sin intereses, préstamos, y cuánto le destinas a su pago.
4. Ya que tienes concentrado tantos tus ingresos como de tus gastos fijos y variables, así como tus créditos, sólo tienes que sumarlos.

5. Después debes restar el total de tus ingresos, es decir: Tus ingresos-(tus gastos+tus créditos).

Esta operación podrá darte los siguientes resultados:

Si tu resultado es positivo, sabes manejar bien tu dinero.
Si el resultado es igual a cero, ni ganas, ni pierdes, tal vez puedes estar mejor, toma acciones.
Si tu resultado es negativo, es decir, gastas más de lo que ingresas, es necesario que pienses como corregirlo.
Y sé que lo has leído aquí hasta el cansancio que si el presupuesto para esto, que si el presupuesto para el otro, pero tal vez el momento en el que te atoras es al querer ponerlo en práctica, seguro crees que es algo bien sofisticado y la sola idea te lleva a dejarlo para después.

Así que partamos de lo básico, en realidad un presupuesto es mucho más sencillo de lo que se ve y escucha: es simplemente la representación de tus gastos e ingresos, sin olvidar el ahorro.

“Es una radiografía de tu situación financiera presente y futura”, establece Piggo, y lo único que tienes que hacer es escribir en un papel, una app, una libreta o Excel, las cuentas que tienes en la cabeza.

Publicado en Excelsior

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