En la era tecnológica, sus datos valen oro; protéjalos

Iván Salomón Rodríguez

Diferentes instituciones tanto gubernamentales como privadas han ido digitalizando sus procesos en beneficio de las personas; sin embargo, ante un mundo cada vez más interconectado, surgen retos y vulnerabilidades en cuanto a la protección de datos personales se refiere.

Ante esto, se vuelve fundamental que conozca cuáles son sus derechos, obligaciones y tomar en cuenta una serie de consejos para evitar que sus datos sean robados y mal usados. Además de conocer qué instituciones lo pueden respaldar.

“En particular, la protección de los datos personales se hace necesaria en la sociedad de la información en la que vivimos, donde el uso de las tecnologías de la información y comunicación permite comunicar, compartir y utilizar datos personales en cuestión de segundos, de manera masiva y constante, casi ilimitada y sin mayores complicaciones”, explica el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).

El INAI señala que este tipo de tecnología ha mejorado la calidad y condiciones de vida de la sociedad en general; sin embargo, dejando de lado sus bondades, su desarrollo lleva implícito retos para la privacidad.

Explica que derivado del uso intensivo que le damos a nuestra información a través de herramientas tecnológicas como el Internet, redes sociales, blogs, teléfonos celulares inteligentes (smartphones), conversaciones en línea, entre otros, nuestros datos pueden estar expuestos.

“Por ejemplo, cuántos de nosotros, de alguna u otra forma, hemos sido objeto de violaciones o amenazas a nuestra privacidad o datos personales, cuando nos solicitan datos personales a través de páginas pirata de Internet. Malintencionadamente se apoderan y utilizan nuestra clave de usuario y contraseña para suplantar nuestra identidad digital”, abunda el instituto.

Los datos personales se dividen en dos, por una parte se encuentran los sensibles, los cuales informan sobre los aspectos más íntimos de las personas, cuyo mal uso puede provocar discriminaciones o ponerles en grave riesgo, como, por ejemplo, el origen racial o étnico o estado de salud.

Los datos patrimoniales o financieros están relacionados con temas económicos de las personas físicas que hacen referencia a los recursos que posee y a su capacidad para hacer frente a sus deudas, como pueden ser: dinero, bienes muebles e inmuebles, información fiscal, historial crediticio, ingresos y egresos, cuentas bancarias, seguros, afores, fianzas, número de tarjeta de crédito, número de seguridad, entre otros.

Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), en nuestro país, las modalidades para cometer fraudes financieros han evolucionado y se han ido incrementando a lo largo de los años, lo que se traduce en la cantidad de reclamaciones por parte de los usuarios.

Durante el 2017, se registraron 8.7 millones de reclamaciones, es decir, 20% más que en el 2016, de las cuales 75% corresponde a posible fraude, es decir, 6.5 millones.

De estas últimas, según cifras de la Condusef, 78,989 corresponden a reclamaciones por posible robo de identidad, con un monto reclamado de 2,127 millones de pesos.

“El manejo inadecuado de sus datos personales no sólo tiene como consecuencia llamadas o correos incómodos o molestos, las consecuencias pueden ser más graves. Piense en el daño que le puede causar que alguien haga un uso indebido de su credencial para votar y datos financieros, robe su identidad y saque créditos a su nombre o compre productos con una tarjeta de crédito”, señala el Inai.

ACCIONES PARA CUIDAR DATOS FINANCIEROS
Para ambas instituciones, es de suma importancia difundir el derecho de protección de datos personales entre los titulares (usted), a fin de generar una cultura de la protección entre la población en México, por lo cual otorgan una serie de recomendaciones para protegerlos.

Para el caso de datos financieros, la Condusef ha referido que el robo se da cuando no se toman las debidas precauciones al realizar compras, pagos de servicios, de impuestos o transacciones bancarias vía Internet.

Asimismo, los delincuentes pueden hacerse de sus datos cuando éstos sustraen su teléfono móvil o cartera con sus tarjetas bancarias. Además, proporcionar demasiada información a través de redes sociales puede traerle problemas a futuro.

“Nunca ingrese sus contraseñas, sobre todo bancarias, a algún sitio al que se llegó por un correo electrónico o chat. No dé a conocer a nadie su Número de Identificación Personal y cambie sus contraseñas de acceso con frecuencia. Antes de tirar a la basura algún documento que tenga información personal o financiera, destrúyalo por completo”, sugiere la dependencia.

La Condusef tiene herramientas con información relevante sobre créditos exprés, alteración de cheques, phishing, clonación de tarjetas, entre otros temas que serán de apoyo a los usuarios, mismas que pueden ser consultadas y descargar en su página de internet.

Por su parte, el Inai reconoció que los sectores con mayor número de multas por infringir la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de los Particulares son los de servicios financieros, seguros, información en medios masivos y comercio al por menor.

Las infracciones cometidas con mayor frecuencia por empresas o personas físicas, por las cuales se han hecho acreedoras a una sanción económica, son tratar datos personales en contravención a los principios establecidos en la ley (licitud, información, responsabilidad, lealtad y consentimiento), recabar o transferir datos personales sin el consentimiento expreso del titular y omitir en el aviso de privacidad alguno o todos los elementos previstos en la norma.

Publicado en El Economista

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