Sarah Robbins-Cole, originaria de Boston, EU, utilizó una misma prenda durante 100 días, con el fin de luchar contra la industria de la moda y ayudar al planeta.
La mujer de 52 años es líder de la iglesia de la universidad y decidió compartir la experiencia de vestir más de tres meses con el mismo vestido en su cuenta de Instagram.
Fue el pasado 16 de septiembre cuando se unió al reto lanzado por la marca Wool& junto a otras 200 mujeres. El desafío consistía en utilizar un vestido color negro hecho con lana de oveja merina.
No obstante, lo que más motivó a Sarah a unirse a este reto de sostenibilidad fue vivir ajena a las modas rápidas y al consumismo de ropa, para así ayudar al planeta, destacó el sitio 20 Minutos.
De este modo, durante casi tres meses utilizó el mismo vestido para trabajar, andar en la calle e incluso para asistir a su cena de Navidad. Aunque añadió diferentes prendas que iba variando por higiene como ropa interior, pantalones para excursiones o abrigos para el frío.
“Para mi sorpresa, llevar la misma ropa durante 100 días seguidos no me quitó nada de mi vida”, declaró. “Al contrario, me ha inspirado para ir un paso más allá y no comprar ropa ni complementos desde el 1 de enero de 2021 hasta el 1 de enero de 2022″.
Tras lograr el reto, Sarah se ha propuesto no adquirir ropa nueva y usar solamente la que tiene.
“Me he dado cuenta de que, a mi edad, tengo ropa para cada ocasión. ¡Y si necesito un vestido de gala, le quito el polvo a uno que haya estado en mi armario desde 1992!”.
La estadounidense explicó que este desafío simplificó y ordenó su vida. “Me hizo pensar en cuánta ropa termina en el vertedero, cuánta agua se usa para producir algodón y cómo no sabemos realmente si la ropa que compramos también está hecha éticamente”, sentenció.
Sarah asegura que el reto también le ayudó a nivel psicológico, diciendo: “Destacar es esa sensación de que todo el mundo te mira cuando, en realidad, probablemente no lo hacen. Y llevar el mismo vestido durante tanto tiempo me ayudó a evitar ese sentimiento”.
Las participantes del reto recibieron un vale de 100 dólares de la marca Wool& para gastar en su tienda de lana sostenible.
Publicado en Mientras tanto en México
