La sociedad castiga más a las madres solteras que a los papás ausentes y es momento de parar

Karen Hernández

Criar a un hijo es una experiencia desafiante, especialmente si eres mamá soltera. Esta situación parece ir en aumento y mientras que la sociedad no deja de señalar a estas mujeres, el abandono de sus parejas termina pasando desapercibido. ¿Por qué señalar más a uno que a otro?

Criar hijos requiere de una aldea, una red de apoyo y en condiciones “normales” se hace al lado del padre, con quien se engendró a estos. Pero claro, las cosas no siempre son como la sociedad espera y muchas mujeres terminan solas con un bebé en brazos o incluso dentro de ellas.

Las madres que trabajan una jornada completa dicen que no tienen suficiente tiempo libre. Es aún más difícil equilibrar el trabajo y la paternidad para las madres solteras que trabajan. Sin embargo, a veces terminamos romantizando esa situación y nos olvidamos de señalar a quien no está y debería estar.

Una madre soltera cuida a los niños sola. Para poder atender a los niños, a menudo no tiene más remedio que dedicar horas de trabajo adicionales. Por lo tanto, equilibrar las responsabilidades profesionales y la crianza de los hijos es un problema importante que enfrentan las madres solteras.

Por si fuera poco, la sociedad no deja de señalarla y responsabilizarla por su situación, provocando sentimientos de culpa en ella.

hijos

La mayoría de las madres solteras están completamente enfermas de la retórica de la maternidad y la culpa, especialmente las madres solteras que trabajan. A menudo sienten que se quedan cortos para siempre cuando se trata de hacer lo suficiente por sus hijos. Sin mencionar a su jefe y su familia extendida, y sí, por supuesto, a su comunidad. Como madres solteras, tienen que hacer todas estas cosas solas, y no siempre es fácil.

La falta de apoyo financiero es una realidad para muchas madres solteras. Si bien es cierto que “el dinero no puede comprar la felicidad”, la falta de apoyo puede causar estrés, ansiedad y opciones limitadas. La situación se agrava cuando se les deja esperando la manutención de los hijos que nunca llega, o tienen que pagar a los abogados para obtener lo que se debe pagar.

Los desafíos emocionales

Ser madre soltera significa que no hay nadie allí para compartir las buenas y malas experiencias. No tiene a nadie con quien mirar sus películas favoritas cuando no puede encontrar una niñera. Ella sigue haciendo malabarismos entre la vida profesional y personal. Como resultado, la sensación de soledad y depresión comienza a aparecer.

No, la culpa no es de la mamá soltera sino de la ausencia del padre, especialmente cuando de efectos psicológicos se habla.  Según un informe de 2007 de UNICEF sobre el bienestar de los niños en países económicamente avanzados, como Estados Unidos., Canadá y el Reino Unido, Los estudios muestran que los niños en edad escolar con buenas relaciones con sus padres tenían menos probabilidades de experimentar depresión, exhibir un comportamiento disruptivo o mentir. Por el contrario, quienes sufren de padres ausentes tienen problemas de conducta, dificultades con el ajuste social y tienen más probabilidades de presentar resentimientos o ansiedades. En lo peores casos, llegan a delinquir, padecer alcoholismo o conductas violentas.

Publicado en Nueva Mujer

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