José Luis Medina
Desde su trinchera, la consejera electoral Dania Ravel impulsa la inclusión, desde establecer un protocolo en el Instituto Nacional Electoral (INE) para que las personas trans ejerzan sus derechos políticos-electorales hasta ser partícipe en la paridad de género de candidaturas a las gubernaturas en la reciente elección del 6 de junio.
Dania Ravel, así como muchos niños, fue testigo del esfuerzo que tienen que hacer mamás profesionistas para lograr sus aspiraciones laborales a la par de las personales, pues mientras su madre laboraba en el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, ella creció en dichas instalaciones.
“Siempre imaginé siendo abogada, supongo que sin querer mi mamá influyó bastante en eso porque ella es abogada, y, además, literalmente, crecí en el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México: fui a la guardería del tribunal y ya cuando estaba más grande la acompañaba a los juzgados, primero ella fue secretaria de Acuerdos, ahora es jueza. Yo estaba ahí mucho tiempo y en realidad conviví mucho con abogados y abogadas y yo creo que eso de manera inconsciente hizo que yo me concibiera siempre que yo iba a ser abogada”, recordó en entrevista para MILENIO.
A pesar del estigma que algunas personas suelen tener de los tribunales, para la consejera electoral pasar momentos de su infancia ahí fue algo que le encantó: “Antes de que mi mamá fuera jueza, me acuerdo de que me metía a la oficina del juez, su jefe, y empezaba a jugar con todos los colores y plumas que tenía ahí, me llevé muy bien con todas esas personas.
“Tuve la oportunidad de dar una conferencia en el auditorio del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, ya siendo consejera del OPLE de la Ciudad de México, y para mí fue muy conmovedor (porque) se enteró la que era directora de la guardería cuando yo estuve ahí y fue a verme entonces realmente siento mucho a esa gente como una familia”.
Aunque en un inicio su meta era ser jueza en materia civil y mercantil, la trinchera electoral apareció en su camino a tal grado que pasó por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), InfoDF y actualmente se encuentra en el INE.
“Cuando estudiaba la carrera trabajé en un juzgado de paz civil y la verdad es que fue una experiencia profesional muy reconfortante para mí: era muy interesante ver el impacto directo que podía tener un proyecto de acuerdo o un proyecto de sentencia en la vida cotidiana de las personas, ahí fue donde yo realmente me enamoré del derecho (…) porque dejé de verlo en abstracto para ver las consecuencias que podría llegar a tener las decisiones que nosotros tomábamos en la vida de las personas.
“En 2004 me invitó a trabajar a la Sala Superior el entonces presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, estuve ahí unos meses porque me invitaron a trabajar cuando estaba ahí al que se llamaba Consejo de Acceso a la Información Pública, que ahora se transformó en el Instituto de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales de la Ciudad de México (InfoDF). Ahí conocí a quien después fue mi jefe, Marco Baños, que fue consejero electoral y cuando lo hacen consejero, en 2008, yo seguía trabajando en el InfoDF, me invitó a incorporarme a su equipo”.
Publicado en Milenio
