Christian Vázquez
Lo que necesitas saber:
La Mona Lisa no sufrió daños gracias al cristal que la protege. Las activistas pertenecen a Riposte Alimentaire, grupo de resistencia civil que busca garantizar la seguridad alimentaria de la población ante la malas condiciones de agricultures y el cambio climático
¿Ahora sí cruzaron la línea? Activistas que buscan generar conciencia por la crisis climática del planeta, arrojaron sopa sobre la famosa Mona Lisa, sí, el legendario cuadro creado por el mismísimo Leonardo da Vinci que está en el Museo del Louvre en París.
Activistas arrojaron sopa sobre la Mona Lisa
Fueron dos activistas que portaban camisetas con el mensaje “Riposte alimentaire (respuesta alimentaria)”, quienes se acercaron a la Mona Lisa y la llenaron de sopa.
En redes sociales se difundió cañón el video, el cual obviamente generó toda clase de reacciones. Principalmente son críticas de quienes sienten que no ayuda en nada su manera de protestar, pero también hay voces a favor de quienes creen que no nos puede preocupar más una pintura (por más legendaria que sea) que el cambio climático y la crisis alimentaria del mundo.
Cabe mencionar, porque esto muy importante para el debate, que la Mona Lisa no sufrió daños. La pintura está exhibida detrás de un cristal a prueba de balas, por lo que la sopa no tocó la pintura, sino ese cristal.
Aquí el video, donde como podrás escuchar, un sonoro “¡ohhhhhh!” se escucha al momento en que las activistas arrojan la sopa sobre la Mona Lisa en el Museo de Louvre.
¿Qué hay detrás de la protesta de las activistas que arrojaron sopa a la Mona Lisa?
Las dos activistas fueron identificadas como Sasha, de 24 años, y Marie Juliette, de 63. La cuenta en X de Riposte Alimentaire, que también compartió el video del momento en que arrojan sopa sobre la Mona Lisa, reveló por qué lo hicieron y qué hay detrás de esta protesta.
“A través de su acción no violenta, exigen el establecimiento de una Seguridad Social Alimentaria Sostenible. En Francia, una de cada tres personas se salta las comidas por falta de medios. Al mismo tiempo, se desecha el 20% de los alimentos producidos. Nuestro modelo estigmatiza a los más precarios y no respeta nuestro derecho fundamental a la alimentación”.
La protesta va relacionada con el descontento de miles de agricultores en Francia ante las medidas impuestas por Emmanuel Macron, las cuales les resultan perjudiciales.
Bajos salarios, eliminación de exenciones en los impuestos al combustible para maquinarias y la importación de productos, son sólo algunas.
“La agricultura es responsable del 21% de las emisiones nacionales de gases de efecto invernadero y contribuye en gran medida al deterioro de nuestra biodiversidad y al empobrecimiento de los suelos; la solicitud de Riposte Alimentaire es la siguiente: “la integración de los alimentos al sistema general de seguridad social”.
Riposte Alimentaire pone sobre la mesa diversas iniciativas
En su página web, Riposte Alimentaire amplia un poco esa información, y lo que más llamó nuestra atención fueron las iniciativas que propone a corto plazo.
- Otorgar una tarjeta alimentaria a cada persona con 150 euros al mes para comprar alimentos
- Un sistema de cotizaciones que garantice un reparto justo y solidario, como en la Seguridad Social
- Un acuerdo para elegir productos de manera democrática, por asambleas ciudadanas locales, con capacitación en temas agrícolas y ecológicos
- Acceso a alimentos saludables que paguen a los agricultores con dignidad
Con esas iniciativas, aseguran que se lograrán cuatro objetivos prioritarios: garantizar las necesidades alimentarias de la población, respetar las limitaciones del planeta, impulsar la transformación profunda de nuestro modelo agrícola afectado por el cambio climático y garantizar una vida digna para los agricultores que nos alimentan cada día.
