Cómo explicar el movimiento estudiantil del 2 de octubre a los niños

Carolina Laureles Reyes

Una parte trágica, negra y dolorosa en la historia de nuestro país es la forma en cómo se reprimió el movimiento estudiantil del 2 de octubre de 1968, fecha que no debemos olvidar como nación.

Hace un año, mi hija de ocho años me preguntó al respecto. Te confieso que nunca había pensado en cómo explicarle lo que pasó, pero coincidió con la ofrenda que se montó en la Plaza de Santo Domingo de la CDMX y obviamente, tenía muchas preguntas sobre lo que sucedió.

¿Cómo explicarles a tus hijos el movimiento estudiantil del 2 de octubre de 1968?

Manteniendo un lenguaje adecuado a su edad, procura decirle a tu hijo o hija las cosas tal y como sucedieron. Por ello, aquí te dejo algunos puntos que son importantes.

Comienza por darle un contexto de la situación internacional

Los jóvenes mexicanos, y en general todos los jóvenes de aquella época, soñaban con un mundo diferente. Querían expresarse y luchar contra gobiernos opresivos en todo el mundo.

Es importante destacar que en esta época, surgieron diversos movimientos alrededor del mundo. Por ejemplo, los jóvenes en Estados Unidos protestaron contra la Guerra de Vietnam; en España se manifestaron contra el Franquismo; en Francia surgió lo que se conoce como Mayo Francés, es decir, se suscitaron una serie de huelgas y protestas que pusieron contra las cuerdas al gobierno de Charles de Gaulle. Y no solo eso, la revolución cubana, llevada a cabo 9 años antes, hizo pensar que la insurrección en Latinoamérica era posible.

Todos y cada uno de esos movimientos inspiraron a los estudiantes mexicanos a continuar manifestándose. Parecía que los tiempos estaban cambiando, ya no querían quedarse callados. Empezaron a debatir y a pensar que era posible un país más demócrata e inclusivo.

Movimiento estudiantil. Foto: Wikimedia Commons

Qué detonó el movimiento estudiantil del 2 de octubre de 1968

El 22 y 23 de julio, en la Plaza de la Ciudadela, un pleito “entre estudiantes” (en el que participaron porros) fue intervenido por policías y granaderos del entonces Distrito Federal, pero lejos de detener el enfrentamiento y parar a los provocadores, agredieron a los estudiantes e invadieron los edificios escolares.

Los estudiantes se unen y crean el Consejo Nacional de Huelga

Molestos por el actuar de la policía, los estudiantes se organizaron y crearon el Consejo Nacional de Huelga (CNH). Pedían la desaparición de los porros en la UNAM y el IPN, la expulsión los estudiantes que participaban en esas agrupaciones, la indemnización del gobierno a los estudiantes heridos en la represión, la liberación de los estudiantes (reales) detenidos y la desaparición del cuerpo de granaderos.

Movimiento del 68 Foto: Wikimedia Commons

Las marchas estudiantiles pusieron a temblar al gobierno

Ante el silencio de las autoridades, el CNH convocó a marchas multitudinarias como protesta. En una de ellas, llevada a cabo el 1 de septiembre, acordaron permanecer en la Plancha del Zócalo hasta que la negociación con la actual administración se concretara. Eso prendió los focos rojos del gobierno y mandó al Ejército a rodear a los estudiantes y advertirles que abandonaran el espacio. Y aunque lo hicieron, los estudiantes salieron gritando: ¡Libertad, México, libertad!

Posteriormente los estudiantes convocaron a otra manifestación, la cual llamaron la Marcha del silencio, aludiendo al silencio que había mantenido el presidente Gustavo Díaz Ordaz. En respuesta, él los amenazó diciendo: “Hemos sido tolerantes hasta excesos criticados, pero todo tiene un límite”.

Tanque en el Zócalo. Movimiento del 68. Foto: Wikimedia Commons

El 2 de octubre de 1968 no se olvidará nunca

El 2 de octubre se planeaba otra movilización. Los jóvenes estudiantes irían de la Plaza de las Tres Culturas al casco de Santo Tomás. El Ejército montó “operativos de vigilancia”, al tiempo que los estudiantes iban llegando. Había alrededor de 15 mil jóvenes. A las 17:30 se informó que la marcha se suspendería, sin embargo, minutos antes de las 18:00 horas, desde la Torre de Tlatelolco, se dispararon dos bengalas rojas, la señal para que el Batallón Olimpia abriera fuego contra los estudiantes.

Hasta la fecha no se sabe cuántos muchachos perdieron la vida. Algunos fueron rescatados por vecinos, taxistas y comerciantes. La pregunta clave que seguramente tu hijo o hija va a tener: ¿Por qué dispararon?

Estudiantes en Tlatelolco Foto: Wikimedia Commons

Hay muchas teorías, se cree que el Presidente Díaz Ordaz temía que las manifestaciones le generaran una mala imagen a nivel internacional previo a las Olimpiadas. Semanas antes ya habían llegado periodistas de todo el mundo para la inauguración de los Juegos Olímpicos el día 12 de octubre. Era la primera vez que los Juegos Olímpicos se transmitirían vía satélite. Esa no era la imagen del país que quería mostrar, no quería verse como un líder endeble. El Presidente quería deshacer de un solo golpe el movimiento estudiantil y lo hizo de una forma brutal.

Sé que es difícil explicar un acontecimiento tan terrible, pero nuestros hijos deben conocer un suceso que es parte de la historia de México.

Mi hija lo comprendió, incluso le platiqué cómo su abuelo, mi padre, pudo escapar gracias a un taxista que, como pudo, subió unos 10 muchachos a su auto.

Como país tenemos esa herida, es por eso que cuando mi hija me preguntó: ¿Por qué el 2 de octubre no se olvida? Se lo expliqué, así como te lo cuento a ti. Sí, es por esto que no se olvida, porque debemos ser conscientes de la historia para evitar que se repita.

Movimiento estudiantil de 1968 Foto: Wikimedia Commons

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