El ejercicio físico evita cesáreas, según un estudio

S.F.

Una investigación de la Universidad de Granada (UGR) ha concluído que las mujeres más sedentarias durante el segundo trimestre del embarazo son más propensas a dar a luz por cesárea. Se desprende de este estudio que aquellas que realizan ejercicio de cualquier intensidad tienen más partos vaginales.

Según informa Europa Press, las investigadoras han asegurado que los bebés de madres con actividad física durante el embarazo «presentaron mejores niveles de saturación de oxígeno y menor acidez en la arteria del cordón umbilical». Esto podría indicar un «funcionamiento óptimo» de la placenta y de los mecanismo compensatorios del feto.

La investigación de la universidad granadina ha sido publicada en la revista «Scandinavian Journal of Medicine and Science in Sports». El estudio pretendía analizar la relación entre el sedentarismo o la actividad física de la gestante y su influencia en el parto. La cantidad de oxígeno que hay en sangre sirve a los médicos para conocer cómo funciona el aparato respiratorio de los niños. Las lesiones de nacimiento relacionadas con la privación fetal de oxígeno son siempre complicadas y peligrosas.

Para este estudio han contado con 94 mujeres con una media de edad de 33 años. Estas madres se sometieron a un estudio prospectivo longitudinal (que se diseña y comienza a realizarse en el presente, aunque los datos se analizan en el futuro). En el proceso, los investigadores colocaron a las participantes «acelerómetros alrededor de la cadera durante nueve días consecutivos».

La autora principal de este trabajo, Laura Baena García, ha asegurado que «el mayor hallazgo del presenter estudio es que los bebés de madres más sedentarias tuvieron mayores concentraciones de dióxido de carbono y por tanto un pH más ácido, tanto en arteria como en vena umbilicales».

Ahora, según las investigadoras, es necesario hacer estudios adicionales para contrastar esta hipótesis.

Más cesáreas de las recomendadas

La Organización Mundial de la Salud establece el porcentaje recomendado para los nacimientos por cesárea. Según este organismoesta práctica sólo está justificada entre el 15% y el 20% de los partos. A pesar de esto, el estudio de la Universidad de Granada confirma que más del 24% de los nacimientos en este estudio se produjeron por cesárea. La OMS informa que esta práctica sólo es eficaz cuando se trata de salvar la vida de la madre y del neonato.

La Organización Mundial de la Salud propuso en 2015 que los sanitarios utilizasen el sistema de clasificación Robson. Éste pretende ser un estándar global para evaluar y comparar las tasas de cesárea, y hacer un seguimiento de estas intervenciones en los centros sanitarios. El sistema clasifica cada mujer en una de diez categorías. Las mismas surgen a partir de cinco características básicas que constan en casi todas las maternidades: paridad, comienzo del trabajo de parto (espontáneo, inducido o cesárea antes del comienzo del trabajo de parto), edad gestacional, presentación fetal (cefálica o podálica) y situación transversa y cantidad de fetos (único o múltiple).

Publicado en abc.es

Otras notas que pueden interesarte