Qué tan conveniente es usar agua oxigenada como enjuague bucal o para blanquear los dientes

Eduardo Marsan

En la actualidad, gran parte de la sociedad por moda, tendencia, recomendación o por criterio propio es más consciente de tener una salud bucal adecuada.

Sin embargo, hay quienes van más allá y crean una afición enfermiza por tener y conservar “brillante y con buen olor” sus dientes y boca haciendo uso de productos que no fueron creados para ese fin; el agua oxigenada, es uno de ellos.

La tendencia

Se ha desarrollado una tendencia de utilizar el agua oxigenada como blanqueador para los dientes amarillentos. Sin embargo, pasan desapercibidas las contraindicaciones que pueden dañar seriamente la salud oral; se queman los tejidos y se irritan.

Su aplicación puede causar una retracción gingival, es decir, una enfermedad periodontal, además de que usarla directamente sobre las piezas dentales puede aumentar la sensibilidad dental, ya que el esmalte se ve seriamente dañado, lo que a su vez provocará un desequilibrio en la flora bacteriana de la boca, y por ende, el desarrollo de otras bacterias.

Aunque se supondría que un “exceso de oxígeno” en nuestra boca podría ser beneficioso, son muchos los estudios que demuestran los efectos negativos de este producto al aplicarlo como dentífrico o enjuague para obtener una “mejor sonrisa”; situación que sí ocurre, pero a qué costo.

¿Qué es?

El peróxido de hidrógeno, conocido también como agua oxigenada, es un líquido incoloro a temperatura ambiente con sabor amargo. Es inestable y se descompone rápidamente, aunque no es inflamable, es un agente oxidante potente que puede causar combustión espontánea cuando entra en contacto con materia orgánica.

El peróxido de hidrógeno es usado en muchos productos domésticos para usos medicinales y como blanqueador de vestimentas y el cabello. En la industria, se utiliza en concentraciones más altas para blanquear telas y papel, como componente de combustibles para cohetes y para fabricar espuma de caucho y sustancias químicas orgánicas.

Puede ser tóxico si se ingiere, si se inhala o por contacto con la piel o los ojos. Su ingestión puede inducir vómitos, leve irritación gastrointestinal, distensión gástrica, y en raras ocasiones, erosiones o embolismo (bloqueo de los vasos sanguíneos por burbujas de aire) gastrointestinal; los tejidos expuestos pueden también sufrir quemaduras.

Cabe destacar que en ninguna ficha técnica u hoja informativa sobre el componente mencionan que emplearlo puede beneficiar la salud bucal, al contrario, destacan los peligros y consecuencias de su mal uso, por lo que hacer caso a las tendencias podría traer repercusiones graves a la salud.

Tubo de dentífrico junto a un cepillo de dientes sobre la mesada del baño, simbolizando la importancia de la higiene dental diaria. Palabras clave: tubo de dentífrico, cepillo de dientes, mesada del baño, dientes, odontología, cuidado dental, productos básicos, higiene personal, precios, salud bucal. (Imagen ilustrativa Infobae)Tubo de dentífrico junto a un cepillo de dientes sobre la mesada del baño, simbolizando la importancia de la higiene dental diaria. Palabras clave: tubo de dentífrico, cepillo de dientes, mesada del baño, dientes, odontología, cuidado dental, productos básicos, higiene personal, precios, salud bucal. (Imagen ilustrativa Infobae)

Otras notas que pueden interesarte