Pedro Moreno
La salud no tiene precio y quien la arriesga, es un necio… Sin embargo, en los últimos años los malos hábitos alimenticios, la falta de prevención y el incremento de las adicciones catapultaron los costos para preservar el bienestar de la población.
La OCDE, al mando de José Ángel Gurria, dio a conocer su estudio Health at a Glance 2019 un amplio análisis que contrasta el avance y los retos para las 36 naciones que forman parte de dicha organización, en la que también está México.
El diagnostico deja mucho que desear. Hoy, uno de cada 10 adultos en esos países considera que tiene una mala salud. Lo anterior como resultado de las enfermedades crónicas que ya afectan a un tercio de la población, y las mentales, como estrés y ansiedad, que afectarán a la mitad de las personas por lo menos una vez a lo largo de su vida.
A lo anterior sume los ataques cardíacos, causantes de una de cada tres muertes; el cáncer, de una de cada cuatro, así como el incremento de la diabetes y enfermedades respiratorias, como influenza y neumonía…
Salud universal… En ese contexto, los países de la OCDE invierten millonarios caudales para el cuidado de la salud. En promedio, el gasto público por persona ronda los 4 mil dólares, 8.8 por ciento del PIB promedio de estas naciones.
Como quiera, ante el mayor envejecimiento de la población y el aumento de enfermedades más onerosas, para 2030 se estima que el desembolso gubernamental en salud podría superar 10.2 por ciento del PIB.
Lo anterior representará un enorme reto, particularmente en países con un acotado espacio fiscal, como México.
De acuerdo a este estudio, hoy, aquí, se destina 5.5 por ciento del PIB para este fin, por debajo de 8.9 por ciento de Chile o 7.8 por ciento de Grecia.
Puntualmente, por mexicano se invierten apenas mil 338 dólares; el nivel más frugal de toda la organización y lejos de naciones como EU donde la cifra supera los 10 mil dólares por persona. Como ve, a años luz de una verdadera salud universal…
De vida o muerte… Además, aunque la cobertura alcanza a 89 por ciento de la población, la realidad es que la infraestructura y personal de atención son insuficientes. Se tienen sólo 2.4 doctores y 2.9 enfermeras por cada mil enfermos.
Bajo ese panorama, muchos optan por atenderse de manera privada con lo que el gasto de bolsillo aquí supera 40 por ciento. Sin embargo, ante las repercusiones que esto tiene en el ingreso familiar, muchos no asisten al médico o lo hacen de manera tardía.
Se estima que la mortandad evitable por enfermedades prevenibles o tratables en México es de 367 por cada 100 mil muertes prematuras, por arriba del promedio de la OCDE, que es de 208.
Con todo lo anterior, hoy, la esperanza de vida aquí es de apenas 75.4 años; menor a la media, de 81 años. Así que gasto en salud, cuestión de vida o muerte…
Publicado en Ruta Sinaloa
